Orquídea Miltonia

No es una de las orquídeas más fáciles de cultivar para principiantes, pero sí para quienes ya tienen más experiencia en el apasionante mundo de las orquídeas. Por esta razón, hoy queremos contarles sobre los cuidados de la orquídea Miltonia: una orquídea de gran belleza que, además de ser ligeramente perfumada, tiene una forma de cultivo ligeramente diferente a otras plantas de la misma especie.

Las orquídeas Miltonia son epifitas nativas del continente Sudamericano donde crecen desde el centro de Brasil hasta Argentina.

Las especies Miltonia que son simpodiales esto significa que cada nuevo crecimiento se originara del rizoma del crecimiento previo, y cada nuevo crecimiento es capaz de portar florescencia (la parte de la orquídea floreciente).

Este género fue descrito por primera vez por John Lindley en 1837, y fue dedicado en memoria del conde F.W. Milton.

Descripción de la Miltonia

A diferencia de otras orquídeas, la Miltonia no necesita forzosamente recibir luz en sus raíces. Esto es debido a que la Miltonia es una orquídea epífita (es decir, que pueden vivir con las raíces al aire suspendidas, incluso, de los árboles) y, a diferencia de otros géneros como la Phalaenopsis, es de pseudobulbos.

Las raíces de la Miltonia son especialmente curiosas ya que son mucho más delgadas, de color blanquecino y mucho más delicadas de manipular a la hora de hacer un trasplante.

Al igual que sus raíces son distintas, también lo son sus hojas. Lejos de esas hojas carnosas a las que estamos acostumbrados, la orquídea Miltonia cuenta con unas hojas en forma de espada y de carácter fino. Si las hojas comienzan a arrugarse en forma de acordeón, esto nos estarán indicando que necesitan más agua; si se ponen de color rojizo, la Miltonia nos estará diciendo que sufre por un exceso de luz directa.

Cultivo y cuidados de la Miltonia

Para determinar cómo cultivar una orquídea Miltonia correctamente, es importante saber su procedencia. Dependiendo de si procede de Brasil o de Colombia, sus necesidades de luz serán diferentes: mientras para las primeras es importante la luz intensa, para las segundas es más recomendable permanecer ligeramente en la sombra. Debido fundamentalmente, a su procedencia: mientras en Brasil habitan en las selvas tropicales, en Colombia y Perú lo hacen en zonas montañosas.

Sí es importante saber que, sea de donde sea, necesita temperaturas cálidas y mucha humedad (en torno a un 75-85% de forma constante durante todo el año). Dado su carácter tropical, tampoco toleran bien el frío (no pueden vivir a menos de 12 grados) aunque es precisamente la baja temperatura un aliado para obligarlas a florecer: si queremos que lo hagan, podemos estimularlas en un ambiente de hasta 15 grados.

Y cuando lo consigamos, cuando la orquídea Miltonia nos regale sus espectaculares flores, podremos disfrutar de otro de sus singulares atractivos: el delicado olor de su floración. Con los cuidados adecuados la floración puede durar entre 4 y 6 semanas para deleitarnos de esa belleza tan familiar de esta orquídea ornamental.